Salud emocional: Ayúdate a cumplir tus sueños.


La inseguridad o la duda es un sentimiento que suele estar en el inicio del camino hacia la meta de cada uno de nosotros, pero sobrepasarla implica creer en sí mismo y seguir caminando, en ocasiones ese “seguir caminando” no es lo que sucede, es ahí cuando hay algo más allá de la duda y la inseguridad, es cuando la salud emocional cobra la importancia que esta siempre ha debido de tener en nuestras vidas.
De acuerdo con el licenciado Suhail Velázquez, “la salud emocional es el manejo responsable de los sentimientos, pensamientos y comportamientos; reconociéndolos, dándoles un nombre, aceptándolos, integrándolos y aprovechando la energía vital que generan para que estén al servicio de los valores”.  
Debido a lo anterior, quienes se encuentran emocionalmente sanos tienen control sobre sus sentimientos de manera asertiva y se sienten bien acerca de si mismos, tienen buenas relaciones personales y han aprendido maneras para hacerle frente al estrés y a los problemas del diario vivir.
De tal modo tener una buena salud emocional va interferir en tomarnos unos segundos y re evaluar las situaciones, tomando las mejores opciones.
Al estar desbalanceados nos dejaremos llevar por las emociones negativas como: la ira, el estrés, el dolor, la ansiedad entre otros. Los altos niveles de ansiedad afectan nuestra salud, pueden llegar a provocar ataques de pánico e incluso en los peores casos ataques cardíacos.
Así que hay que dejar de subestimar el estado de salud de nuestra cabeza y de nuestras emociones.  
De esta manera estar balanceadas emocionalmente nos ayudará en un 100 por ciento en alcanzar nuestras metas, tendremos mejores ideas, nos sentiremos más cómodas con nosotras mismas y esta receta nos lleva a la confianza, a creer en sí mismo.
Trabajar en la salud emocional pese a los simples términos de su práctica conlleva un gran esfuerzo interno por parte de cada persona, los siguientes son algunos tips con los que te puedes ayudar, conocerte mejor y llevar no sólo un estilo de vida más saludable sino que también te ayudará a tomar esas decisiones para poner en marcha tu sueño y llegar a la meta que tanto has deseado.
Aprende a conocerte y reconocerte: Este será ese gran salto, en el que no solo sabrás quien eres si que también tendrás que autoevaluarte, de esta manera sabrás qué emociones te invaden con los nombres correctos y así sabrás cómo gestionarlas.
No te reprimas: No te encierres, siempre hay alguien con el que puedas contar, esa persona en la que confías, ella o él, te puede escuchar y no sólo te acompañará si no que también te ayudará a encontrar las respuestas que necesites, puesto que él o ella ven todo desde fuera y tienen un imagen más clara del panorama.
Sé asertiva emocionalmente con los demás: Esto quiere decir que nunca trates a los demás cómo no te gustan que te traten a ti, si existe algo que no te agrada, hablar de la manera más directa pero en ningún momento siendo agresiva va a ayudarte.
No sobredimensiones las situaciones: Está bien que el ruido te cansa, que no encuentras las llaves o que el tráfico está pesado, a todos nos agobia un poco, pero no le des toda tu energía a la frustración, con eso sólo consigues alterar tu sistema nervioso, tener un mal momento y que quien está a tu alrededor quiera salir corriendo por su vida, ahorra esa energía para las situaciones que lo ameriten, si contar del 1 o al 10 no funciona, sal del espacio en el que te encuentres, camina y respira, te lo vas a agradecer a ti misma.
Piensa en las soluciones: no solo te hace reaccionar de inmediato, si no que también te muestra el tamaño real de la situación y la emoción que le estás aportando, al pensar en la solución no sólo estarás siendo ,más proactiva si no que te sentirás útil y mejor contigo misma.
Trabaja en tus relaciones sociales: Sal y queda para salir con tus amigos o familiares, de esta manera no sólo respiras de tus problemas, puede que ellos te ayuden a liberar peso, a encontrar salida, aparte estarás bajo el cuidado de ellos, está bien que seamos mujeres del siglo XXI: Independientes y capaces; pero todos necesitamos que nos cuiden y liberar un poco de peso.
Cuídate: Si el propósito #1 (de tener un estilo de vida saludable) de año nuevo por la raza humana se está quedando atrás, tranquila cualquier momento es bueno para comenzar, “no necesitas al 1 de enero para empezar” (Un par de amigos me dijeron esta frase y la aplico desde antes de ese momento, pero ahora soy más consciente y procrastino menos, y por estos días lo aplico en absolutamente todo) come ligero, toma agua y saca tiempo para hacer actividad física, no solo van a verse cambios en tu peso y apariencia física, tus niveles de cortisol e insulina serán más estables y serás más sensible a la dopamina (Por experiencia, SI Y SI estar consciente y cuidarte te hace más feliz y seguro. ¡Te lo garantizo!).
Respira y relájate: Por estos días es difícil en medio de tanta prisa y situaciones que atender, pero por tu bien respira y toma aire, toma clases de yoga, meditación, natación, camina o baila, lo que sea que al final te deje tan tranquilo como a un bebé a punto de tomar su siesta.
Así que ya lo saben no se escondan de sí mismas, no le den largas a esas emociones negativas que sólo te sirven para arruinarte la vida y seguir compadeciéndote (de esa manera nunca alcanzarás tu meta), cuídate, ámate, explora tu creatividad y haz lo que amas, sólo hacer eso te va a dar la seguridad y la fuerza para seguir dando pasos y subiendo escalones, como la gran persona y mujer que eres, cuando creces no sólo lo haces por ti, hay varias personas viéndote y tu trabajo no sólo es de ejemplo, si no que inspira a otros, porque aunque no lo creamos esa es la manera de cómo dejamos huellas los seres humanos.


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